Las estrías son cicatrices lineales que aparecen en la piel a consecuencia de un exceso de tracción o estiramiento de la misma.
Aparecen más frecuentemente en mujeres y relacionándose principalmente con cambios de volumen corporal (musculación, embarazo, crecimiento, cambios bruscos de peso,…), aunque también pueden estar causadas por alteraciones hormonales (hipercortisolismo), genéticas e incluso fármacos.
Durante la adolescencia, es típico verlas a nivel de ambas mamas, glúteos y muslos -sobretodo en mujeres-, y nivel de espalda baja como las regiones dorsolumbar y lumbosacra -predominio en varones-.
Durante la gestación también pueden aparecer estrías a nivel de abdomen, sobretodo durante el tercer trimestre del embarazo.
En las fases iniciales, las estrías adquieren un color rosado o amoratado, tienen una textura suave o incluso sobresale del nivel normal de la piel, denominándose estría rubra. Posteriormente, la estría adquiere un aspecto pálido, con superficie arrugada e incluso pierde volumen, llamándose entonces estría alba.
Respecto al tratamiento, no existen protocolos que estipulen el orden exacto de los tratamientos y, en general, los resultados suelen ser bastante modestos.
De forma preventiva, se recomienda el uso de cremas hidratantes que contengan Centella asiática y evitar cambios bruscos en el peso corporal.
Respecto a los tratamientos tópicos, aunque la eficacia para prevenir las estrías es escasa, el ácido retinoico y la tretinoína se han mostrado útiles. Otros agentes tópicos, como el ácido hialurónico, la silicona, el ácido ascórbico, los ácidos tricloroacético y glicólico, e incluso los aceites de coco, oliva o almendra no han demostrado eficacia hasta el momento.
Centrándonos en el campo de los dispositivos lumínicos, las estrías pueden tratarse con láseres ablativos y no ablativos.
Los láseres ablativos son altamente efectivos estimulando la creación de nuevo colágeno pero también se relacionan con generar eritema (enrojecimiento), dolor y costras tras el tratamiento, con el riesgo añadido de alterar la pigmentación de la piel, por lo que habrá que escoger muy bien el paciente que puede beneficiarse de este tratamiento por tal de evitar efectos adversos. Dentro de este cajón de láseres, encontramos el láser CO2 que puede ser de mayor eficiencia (menor número de sesiones de tratamiento) en estrías antiguas (estrías blancas).
Los láseres no ablativos, al no ser tan agresivos como los ablativos, suelen tener mejor postoperatorio, con el consecuente menor riesgo de efectos adversos y también la necesidad de mayor número de sesiones para mejorar la estría. El láser fraccionado no ablativo 1550nm se ha relacionado con mejora de la elasticidad, el color y la textura de las estrías. Suelen ser necesarias más de 5 sesiones de tratamiento con un intervalo entre éstas de 4-6 semanas.
Dentro de los láseres no ablativos, el láser Nd:YAG 1064nm de picosegundos también se ha mostrado eficaz frente al tratamiento de estrías y como una opción segura en pieles más oscuras (fototipos altos).
La radiofrecuencia con microagujas también se ha probado eficaz en el tratamiento de las estrías, aunque también requiere múltiples sesiones separadas de 4 semanas entre ellas, pudiéndose obtener después de las sesiones cierto enrojecimiento, hematomas y alguna ampolla después de la sesión (sobretodo si se usa energía alta).
Otras terapias como el plasma rico en plaquetas, tratamiento con microagujas (microneedling), carboxiterapia, luz infrarroja, etc. no han demostrado eficacia en los estudios publicados y se necesita más experiencia para poder garantizar los resultados.
En general, se recomienda como primera línea de tratamiento de las estrías el uso de láseres fraccionados o el uso de radiofrecuencia fraccionada con microagujas. En caso de buscar alternativas terapéuticas más económicas, el uso de peelings podría ser una opción válida aunque con resultados modestos.
Siempre es importante recalcar que ningún tratamiento se ha demostrado eficaz para la desaparición completa de las estrías y siempre es recomendable realizar múltiples sesiones de tratamiento para apreciar la mejora de las mismas, incluso combinando diferentes tratamientos.
Si hasta ahora pensabas que no había tratamientos efectivos para las estrías o has probado diferentes alternativas sin mejora, recuerda que puedes solicitar visita para revisar todas las opciones posibles.
Bibliografía:
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